Review: Casio FX-8000

Antes de comenzar, he de agradecer la inestimable colaboración de Albaricoque, del blog "Rodeada De Idiotas", para la realización de esta review. Es una valiosa amiga, divertida e inteligente, además de fotógrafa aficionada pero de nivel, que ha tenido a bien colaborar con nosotros, rebuscando en cajones de su casa para encontrar chismes viejunos que recordar.

Comenzaré por copiar la temática de su blog, y nombrarme "Idiota de la semana", por haber dejado escapar un modelo de calculadora Braun del cual quería hacer también review, además de un versus, ya que es básicamente en su aspecto en lo que se basó la calculadora del Iphone. No la compré por dos duros, ya que a veces intento controlar mi tendencia al Síndrome de Diógenes, y esa vez, la jodí. A lo hecho, pecho.

Vamos pues con el modelo que trataremos hoy.  

 La estética de la máquina es clásica pero elegante. Destacamos que se conserva en un estado magnífico, a pesar de ser un máquina anterior a 1986. Lanzando una busqueda por Google, se ve claramente que queda eclipsada por su hermana mayor, la FX-8000G, una calculadora gráfica y programable, una de esas bestias de los japoneses que hacían las delicias de los estudiantes de la ingenierías. Aún recuerdo esas innumerables tardes de estudio en la facultad de Arquitectura de la UPM, donde todos los aparejadores iban siempre con su FX-880P.

   

Conserva todavía su funda original y las instrucciones, algo valorable, dado que encontrarlas en inglés ya es una odisea, siendo el alemán, idioma tan de moda como difícil de aprender, el idioma dominante en los pdf's que se encuentran en el Internet.

En cuanto a la misma, presenta una característica común a infinidad de productos Casio: la integración de funciones en los aparatos. Así como hay relojes Casio con mando a distancia, está maravilla incorpora un stopwatch (cronómetro) con diversos modos de registro de vueltas (lap), así como un pequeño beeper en la esquina superior derecha, tanto para esta función como para la introducción de dígitos.

En la esquina superior izquierda incorpora un botón de Power, bajando encontrarmos la pantalla LCD, en un color verde-amarillento que nos chifla, y dominando la parte centrar de la misma, un pequeño selector para las funciones del cronómetro, así como un botón start/stop para control de la misma. 

Otro selector nos permite cambiar mecánicamente entre las funciones de grados, sexagimales (DEG) o centesimales (GRA), y radianes (RAD), y además la capital función SD, que cambia el funcionamiento de la máquina a modo estadístico, capital para utilizar las funciones, escritas en color azul bajo la teclas de la parte inferior.

Estas teclas son las clásicas de toda calculadora científica de calidad, donde nos encontramos las clásicas funciones trigonométricas (entre otras muchas), que tanto recordamos de la época de instituto. Personalmente, me encantaba esa parte de las matemáticas de primero y segundo de Bachillerato, los cursos previos a la Universidad, aclaración para nuestros lectores de más allá de nuestras fronteras.

Nos quedan simplemente las teclas con las funciones matemáticas básicas, los dígitos y el AC, además de algunas funciones secundarias a utilizar en el modo SD antes citado.

En resumidas cuentas, una autentica maravilla ochentera, que imagino utilizo el padre de nuestra colaboradora en sus años de estudiante, y que ha llegado hasta nuestros días en un estado envidiable y totalmente funcional.

Nos encanta la combinación de aluminio y negro de las teclas, la fuente utilizada y el LCD sin retroiluminar. 

Nos vemos el jueves, no sin antes daros las gracias por estar ahí.